Rollos de una noche que se convierten en algo más. Fines de semana de evasión que transcienden a una catarsis emocional. Weekend refleja con realismo la complejidad de las relaciones humanas, las dificultades de abrirse emocionalmente ante el otro. El conflicto de la película de Andrew Haigh recuerda a Antes del amanecer, pero con la crudeza cotidiana de la actualidad. Las cosas no son igual de sencillas cuando, mientras acaricias a la persona deseada, alguien te grita “maricón”.