Entre el patetismo y el triunfo, Carlos Gutiérrez es un doble del Rey del Rock que actúa en Buenos Aires. Separado de su mujer y su hija y desfilando entre otros imitadores, El último Elvis niega la realidad que le rodea viviendo excéntricamente como si fuera la reencarnación de su ídolo. Su obsesión es su prisión y, al mismo tiempo, su salvación. Entre escalofriante y conmovedor este cuento social, este viaje demencial, dirigido por Armando Bo II sobre las consecuencias de la mitomanía.